El papa Francisco beatificó a la fundadora del Instituto San Luis Gonzaga
Según confirmaron las autoridades de la institución, la máxima autoridad de la iglesia católica aprobó el pasado 4 de mayo la publicación del milagro que convierte en beata a la cordobesa Josefa Saturnina Rodríguez, más conocida como Madre Catalina de María.
En julio del año pasado la Junta Médica Vaticana ya había aprobado el milagro que convertiría a Madre Catalina en la novena beata argentina. Se trata de la fundadora del Instituto San Luis Gonzaga de la capital puntana, y de la Congregación de Hermanas Esclavas del Corazón de Jesús.
“Para nosotros es una gracia grande recibir esta noticia. Madre Catalina se convierte así en alguien que podrá interceder por nosotros en momentos difíciles; un referente que nos alienta a transgredir como ella lo hizo al trabajar tan duro y enfrentarse a tanto para fundar las Hermanas Esclavas y los institutos educativos en una época muy difícil, sobre todo para las mujeres”, señaló la representante legal del Instituto San Luis Gonzaga de la ciudad de San Luis, Beatriz Saad.
“Hoy, la transgresión en las mujeres tiene, a veces, una connotación negativa, las causas son buenas, pero no creemos que los medios elegidos sean adecuados. Que las mujeres transgredan y se ganen un espacio, que vean concretar sus causas es muy importante, pero también es mucho trabajo y en esto buscamos que Madre Catalina nos inspire e ilumine con su ejemplo”, aseguró la representante de la institución que el pasado marzo cumplió 122 años.
No se conoce la fecha exacta de la ceremonia de beatificación, pero está confirmado que será en Córdoba, lugar de nacimiento de Madre Catalina, y donde además se encuentra la casa madre de la Congregación.
El milagro aprobado por la iglesia ocurrió en Tucumán, y la protagonista fue la madre de una empleada de un colegio, también fundado por Catalina.
Sofía Acosta sufrió una afección cardíaca importante que la tuvo 25 minutos muerta. Su hija, que había pedido el milagro a Madre Catalina para que la enfermedad no le arrebatara a su madre, nunca perdió la fe.
La mujer no murió y que haya sobrevivido luego de un pronóstico tan complicado, fue considerado un milagro grande. El tiempo que estuvo sin vida no le generó ninguna secuela en su salud y así lo comprobaron los estudios médicos; la cura que experimentó superó todo lo que la ciencia podía hacer. Ella, sus familiares y los médicos que la atendieron, dieron el testimonio que viajó hasta el Vaticano.
Madre Catalina “vivió 48 años como laica y sólo 24 como religiosa”, según contó la hermana Silvia Somaré sobre la vida de esta mujer tan especial. En su vida laica, Josefa Saturnina Rodríguez se casó, dio a luz a una hija (aunque nació fallecida), enviudó, cuidó a los hijos de su marido y fundó una congregación, la primera de mujeres no orientada a la vida contemplativa.
“Quería ser como los jesuitas, pero en mujer”, sintetiza la religiosa en el libro “La historia en manos de transgresoras”, que plasma la obra de la fundadora del instituto San Luis Gonzaga.
La obra de Madre Catalina, entrañable amiga de otro gran religioso, San Cura Brochero, llegó muy lejos. Actualmente las Hermanas Esclavas del Corazón de Jesús (Argentina) tienen actividades y misiones en Argentina, Chile, España y Benín en África. Trabajan con menores en riesgo en los Hogares que existen en los pueblos originarios, con los wichis y en la Isla de Pascua con los Rapa Nui, además de las distintas etnias africanas. También en colegios y casas de ejercicios espirituales, siendo la de Villa Cura Brochero, la gran herencia y tesoro más preciado.